El enfermero José Fernando N., quien fue baleado el pasado 26 de febrero en un intento de asalto en la carretera federal Puebla-Tehuacán, a la altura de Tepalcayuca, Amozoc, falleció el 3 de marzo tras varios días de lucha en el hospital. Apenas este fin de semana trascendió su muerte, luego de que fuera homenajeado en el Hospital de San José por sus compañeros, y posteriormente sepultado en Tochtepec, su tierra natal.

Cuando José Fernando se dirigía a su trabajo en el Hospital IMSS San José, en aquella ocasión, se señaló que un grupo de hombres armados lo interceptó para robarle su camioneta KIA blanca. Durante el intento de atraco, le dispararon en la cabeza y huyeron sin consumar el robo. La víctima fue trasladada de urgencia al Hospital de Traumatología y Ortopedia de la Secretaría de Salud, donde permaneció algunas horas antes de ser llevado al Hospital de Traumatología y Ortopedia del IMSS, donde lamentablemente perdió la vida el 3 de marzo, a causa de un traumatismo craneal provocado por el impacto de bala.
El hecho generó indignación en el gremio médico. El 28 de febrero, antes de su fallecimiento, compañeros del IMSS y de otros hospitales protestaron en la ciudad de Puebla exigiendo justicia. Argumentaron que este no es un caso aislado, pues los trabajadores de la salud han sido víctimas frecuentes de la delincuencia en el estado.
El pasado viernes, tras conocerse su muerte, el personal del Hospital San José le rindió un homenaje de cuerpo presente en el patio del nosocomio. Familiares, amigos y compañeros lo despidieron con flores, globos blancos y oraciones. Posteriormente, sus restos fueron llevados a San Martín Caltenco, Tochtepec, donde fue sepultado.
Hasta el momento, no se ha reportado la captura de los responsables. La familia de José Fernando y sus colegas insisten en que este crimen no puede quedar impune y demandan a las autoridades reforzar la seguridad en la zona.
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